La 35 edición del maratón Trinidad Alfonso de Valencia ha tenido aproximadamente 16.700 participantes, más 8.500 si contamos la carrera paralela de 10 kilómetros. Ha habido más de 300 periodistas acreditados para informar de sus evoluciones. La capital del Turia ha estado sembrada con 148 puntos diferentes de animación, 23 de ellos organizados por comisiones falleras de la ciudad; es decir, cada 300 metros aprox. los corredores han sentido cómo la ciudad se vuelca con su hazaña de completar los 42 kilómetros y 195 metros.
Se mire donde se mire, esta edición del maratón valenciano es la edición de los récords. Las barreras se superan de forma exponencial, tanto en el crecimiento de participantes como en la implicación de la ciudad con esta prueba, que se ha convertido en uno de los principales referentes deportivos del año.
Gran impacto económico. El crecimiento del impacto económico que tiene el maratón en la ciudad explica la rentabilidad que se obtiene con ella: el año pasado se cifró en 10 millones y medio de euros, y el crecimiento en el número de participantes va a multiplicar estos ingresos. Hay un dato enorme: la cuarta parte de los inscritos son extranjeros. Más de 4.000 personas vienen desde fuera de nuestras fronteras, generalmente con sus familias, para disfrutar del maratón y, de paso, conocer Valencia.
Hace pocos días, Valencia estrenó su flamante reconocimiento como mejor maratón de España, consolidando su posición en el calendario de maratones internacionales como una cita ineludible y con un circuito propio para lograr marcas deportivas de referencia, quedando así por delante de clásicos como Madrid, Barcelona o Sevilla. Además del número de participantes y la vinculación con la ciudad, hay otro factor que explica el enorme impulso que ha adquirido el maratón valenciano: la calidad de sus marcas.
En el apartado deportivo El Trinidad Alfonso posee desde 2013 el mejor registro que se ha logrado nunca en un maratón en nuestro país. Pero este domingo Felix Kipkemoi Keny, el hombre que tenía en sus piernas esa marca (2 h07,14), ha visto como el keniano John Mwangangi ha hecho añicos el récord del circuito, que a su vez es la mejor marca en suelo español con 2h06:13 . En mujeres, la namibia Beata Naigambo ha defendido con éxito su triunfo del año pasado pero con un crono casi 4 minutos más rápido, lo que supone una nueva plusmarca de la carrera con 2h26:57.
Ambos conocían la ciudad de carreras anteriores (Mwangangi ha ganado en dos ocasiones el Medio Maratón de Valencia), por lo que se valieron de su experiencia y excepcional momento de forma para correr más r John Mwangangi no partía como principal favorito pese a haber ganado dos veces el Medio Maratón Trinidad Alfonso (en 2010 y 2011), ya que hasta hoy no había conseguido trasladar a los 42,195 kilómetros su excepcional rendimiento en distancias más cortas de ruta. Sin embargo, este año en Valencia se mostró como un atleta maduro, capaz de aprovechar su gran oportunidad en un día en el que la climatología ha sido favorable, dando la razón al director de carrera y presidente de la SD Correcaminos, Paco Borao, que siempre ha apostado por él desde los inicios de su carrera deportiva, que le ha llevado a participar nada menos que seis veces en Valencia entre el Maratón y el Medio Maratón.
Mwangangi se mostró desde el principio como el más fuerte, siempre detrás de las liebres que pasaron el medio maratón en 1h03:19, y asestando el golpe definitivo a falta de un kilómetro, cuando abandonó la compañía de su compatriota Matthew Kisorio, que fiel a su estrategia de front runner dió la cara al retirarse las liebres y tiró con decisión desde el kilómetro 35. Fruto de su valentía, éste último consiguió la segunda posición y una plusmarca personal de 2h06:33, mientras que Félix Kandie también corrió más que nunca y se llevó el tercer puesto con 2h07:07. Los tres rompieron el récord del circuito.
La cuenta de llegados a meta se ha cerrado en 14.466 con la entrada de Eduardo Catalá Forner, corredor de Castellón, que se ha convertido en el último corredor en cruzar la línea de meta con un tiempo oficial de 6:19:09, cerrando así la lista de participantes que han cruzado la línea y que con su entrada y su esfuerzo, han sumado a la cantidad simbólica solidaria de 1 € por corredor que realiza la Fundación Trinidad Alfonso. Una cantidad económica que, finalmente, queda en 14.466€ solidarios, que serán destinados a la Asociación Activa Espina Bífida de la Comunitat Valenciana, entidad solidaria de esta edición de 2015, junto al resto de aportaciones solidarias que ha generado la carrera.
En el apartado del atletismo local, cabe destacar la actuación de los corredores pertenecientes al Club Atletismo Antonio Amorós, que ha estado representado por 6 participantes en el Maratón y 2 corredores en los 10 K paralelos. Dentro de los cuales habría que resaltar que el primero en cruzar por la alfombra y línea de meta fue José Ortega con un tiempo de 3:06:08, manteniendo su tiempo del año pasado, seguido por Francisco Mollá con 3:13,55, el cual baja su marca en algo más de 3 minutos, Antonio J. Sánchez marcó un extraordinario tiempo de 3:37:38 bando en 14 minutos su marca, Juan José Rey, también con un tiempo de 3:51:46, baja su marca en uno 8 minutos, José Antonio Sánchez tardó 3:55:25 y por ultimo Javier Puche cerró la aventura caudetana con un meritorio tiempo 4:34:17. En el 10 K Toni Gallur y Pablo Gallur, padre e hijo, respectivamente cerraron el crono antes en un tiempo de 54:03 restando a su marca del año pasado en 1,40 minutos menos.
Todos ellos destacan el ambiente de la prueba, el buen clima que les ha acompañado y la alegría de poder terminar con éxito el objetivo señalado tras los meses de entrenamiento.