A medida que las naciones de la UE invierten más dinero en ensayos clínicos e investigación, las posibles aplicaciones terapéuticas del cannabis se vuelven cada vez más emocionantes. De hecho, en 2019, el Parlamento europeo aprobó una resolución que invita a la Comisión Europea y los gobiernos asociados a considerar el uso terapéutico del cannabis. 

Los diputados europeos consideran que los médicos deben valerse de su juicio profesional para recetar medicinas a base de cannabis. Además, creen que deberían ser medicamentos cubiertos por los sistemas de salud nacionales debido a sus propiedades equivalentes a otros fármacos. Conoce los nuevos tratamientos y aplicaciones del cannabis medicina para mejorar la calidad de vida de las personas.  

Osteoporosis 

 Desde hace tiempo, los adultos mayores han estado usado CBD para recibir un alivio analgésico de los síntomas de la osteoporosis. Sin embargo, el cannabis podría tener un efecto más profundo. El sitio de información sobre cannabis y sus derivados cannaconnection informó sobre un estudio que demostró que, cuando se trata rápidamente, el CBD puede fortalecer y acelerar la reparación ósea natural. Por supuesto, este fue solo un estudio y se necesitan más ensayos.  

Dolor crónico 

 A través de un estudio realizado en la Universidad de Nuevo México, se demostró que el cannabis reduce hasta 3 puntos el dolor crónico. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta problemática afecta al 20% de la población adulta. 

Los productos de cannabis ricos en tetrahidrocannabinol (THC) han demostrado tener efectos analgésicos gracias a sustancias como los terpenos y flavonoides. El resultado es una reducción de la intensidad del dolor. 

Insomnio  

 La incapacidad de conciliar el sueño de forma crónica es una de las enfermedades que puede conducir a consecuencias más graves en la salud de un paciente. Normalmente, es provocada por factores ambientales, de salud o el estilo de vida.  

El sistema endocannabinoide participa en los procesos de modulación del sueño. Existe evidencia de que el consumo de productos con CBD, especialmente en aceites, reducen la sensación de ansiedad y permiten conciliar mejor el sueño. Además, el cannabis con altas concentraciones de CBD contiene mirceno, un componente aromático con efectos sedantes que induce al sueño.  

Falta de apetito 

 La marihuana medicinal ayuda a mitigar la falta de apetito y la pérdida de peso en las personas que padecen enfermedades como el VIH/SIDA o cáncer. Normalmente, este problema es causado por la propia enfermedad y por los cambios en el sentido del gusto que ocasionan las terapias.  

Tratamientos como la quimioterapia suelen provocar un gusto amargo o con sabor metálico. Esta situación genera inapetencia a los pacientes, debilidad y menos tolerancia a los procedimientos médicos. Esto puede acabar en problemas de anorexia o pérdida de peso que agravan el estado de salud del paciente.  

Un estudio realizado en Canadá observó que el 73% de los pacientes que fueron tratados con THC percibían con más satisfacción la comida. Además de esto, el 55% de los participantes el grupo que consumió cannabis aseguró una notable mejora en el sabor de la comida.  

Para seguir descubriendo nuevas aplicaciones del cannabis medicinal, harán falta más ensayos clínicos con un mayor número de participantes. Es importante seguir indagando en el papel del THC y CBD, estudiando si existen efectos secundarios a largo plazo y cómo minimizarlos.