La Asociación de Amigos de la Historia Caudetana, Los del Palo y el Ayuntamiento de Caudete han organizado un homenaje al Cabo José Olivares Conejero, uno de los integrantes del destacamento de Baler conocido como «Los Últimos de Filipinas». El cabo Olivares, de Caudete, fue uno de los héroes del destacamento, y uno de los 33 soldados supervivientes.
Los actos de homenaje se realizarán el 17 de junio, a partir de las 9:00 horas.
En el sitio de Baler, Filipinas, participó el caudetano José Olivares Conejero, que tenía la graduación de cabo. Este hecho histórico tuvo lugar entre el 30 de junio de 1898 y el 2 de junio de 1899, periodo durante el cual un destacamento español fue sometido a un asedio en la iglesia de San Luis de Tolosa (Baler) por parte de los insurrectos filipinos.
En diciembre de 1898, con la firma del Tratado de París entre España y Estados Unidos, se puso fin formalmente a la guerra entre ambos países (que habían firmado un alto el fuego en agosto) y España cedía la soberanía sobre Filipinas a Estados Unidos. Sin embargo, el destacamento español, no conocedor del fin de la guerra, continuó resistiendo. Las noticias que los filipinos les hacían llegar anunciándoles el fin del conflicto las consideraron falsas, y creyeron que tenían por objeto su rendición.
Incluso las autoridades españolas trataron de convencer al destacamento con el envío de varios emisarios, que fracasaron en su intento de que depusieran su actitud, y sólo tras el regreso del coronel Aguilar, el último de los negociadores, y tras hojear unos periódicos que se había dejado en la iglesia, se dieron cuenta de la realidad. Por fin, el 2 de junio de 1899, tras 337 días resistiendo el asedio, el destacamento español se rindió.
Las autoridades filipinas aceptaron unas condiciones honrosas de capitulación y permitieron su paso, sin considerarles prisioneros, hasta Manila, con el presidente filipino Aguinaldo emitiendo un decreto en el que exaltaba su valor. Tras un recibimiento apoteósico en la capital filipina, los supervivientes fueron repatriados a España. El teniente Martín Cerezo y el capitán Las Morenas, éste a título póstumo, recibieron la Cruz Laureada de San Fernando, el médico Vigil de Quiñones recibió la Cruz de primera clase de María Cristina, y el resto fueron condecorados con la Cruz de Plata del Mérito Militar con distintivo rojo.
Casi medio siglo después, el cabo José Olivares Conejero asistió en Caudete a la proyección de la película “Los últimos de Filipinas”, película española dirigida por Antonio Román y estrenada en 1945, cuyo argumento gira en torno al sitio de Baler.
Sin embargo, la última versión cinematográfica de este hecho histórico, «1898. Los últimos de Filipinas», del director Salvador Calvo, ha cosechado numerosas críticas por su falta de rigor histórico y por la forma en la que trata a aquellos soldados, a los que poco menos que caricaturiza.
Los actos de homenaje al héroe caudetano se irán publicando conforme se vayan dando a conocer más detalles.