Existen muchos tipos de plagas diferentes que pueden adueñarse de nuestros hogares. Cosas tan simples como vivir cerca de una zona rural o en un edificio que no cuente precisamente con las mejores instalaciones puede provocar que acabes topándote con visitantes no deseados como cucarachas, hormigas o incluso ratas.

Aun así, existe otra plaga también bastante frecuente y que puede ser especialmente molesta por lo difícil que resulta acabar con ella: las chinches. Si no sabes exactamente qué son, te adelantamos que debes evitar por todos los medios que intente adueñarse de tu hogar, porque pueden ser un auténtico quebradero de cabeza para ti y para los tuyos.

Chinches: qué son y cómo debes evitarlas en casa

Las chinches son unos parásitos diminutos que tienen un color a medio camino entre el rojo y el marrón y que pican la piel de las personas y animales. Aprovechan cuando están dormidos para adherirse y alimentarse con su sangre. El problema con ellas, principalmente y aunque no suelan ser transmisoras de enfermedades, es que pueden causar reacciones alérgicas cutáneas o incluso picores extremos.

Son fáciles de detectar, aunque esto se consigue principalmente cuando pican, por cómo se refleja en la piel. Suelen esconderse en grietas o incluso en las estructuras de las camas o en objetos cercanos y se sabe que han actuado cuando encontramos por el cuerpo picaduras rojas con una mancha roja y oscura en el centro, repartidas por pequeños grupos o en líneas y ubicadas principalmente en las zonas del rostro, los brazos, el cuello o las manos.

También se pueden detectar si hay manchas en las sábanas o en las almohadas, si se observan pequeños rastros de piel generados por sus mudas o incluso cuando empieza a haber un olor desagradable, algo que pasa sobre todo cuando su presencia se multiplica.

Si has detectado chinches en casa o tienes indicios de su existencia, te vamos a contar cómo eliminar chinches y evitar así su molesta picadura.

Cómo eliminar a las chinches fácilmente

Existen varios métodos bastante eficaces para acabar con las chinches. El primero, y el más habitual, es usar detergente. Debes mezclar tres cucharadas de detergente en polvo con medio vaso de alcoholo isopropílico y dejar la combinación reposando toda una noche. A la mañana siguiente, se añade agua hirviendo.

Esa mezcla resultante debe llevarse finalmente a muebles, colchones y cojines, haciendo especial hincapié en las zonas de las costuras, ya que es precisamente en ellas donde suelen esconderse más las chinches.

Otra opción es usar una mezcla de bicarbonato de sodio y sal. Es la más habitual para acabar con hongos y diferentes tipos de plagas, combinando ambos elementos a partes iguales y repartiendo la mezcla por todas las zonas donde puedan y suelan esconderse las chinches. Se deja puesta todo un día y, al siguiente, se aspira fácilmente para dejar las superficies limpias y con las chinches erradicadas.

Estos son los principales métodos que pueden no solo acabar, sino también evitar las plagas de chinches. De hecho, se recomienda aplicar el primero al menos una vez cada tres semanas para mantener el hogar mucho más protegido y prevenir considerablemente la llegada de cualquier posible plaga de chinches. Más vale prevenir que invertir tiempo en eliminar o, sobre todo, tener que sufrir las molestas picaduras de estos insectos.

No dudes en recurrir a profesionales

Aunque hemos facilitado varios métodos caseros que pueden funcionar bastante bien a la hora de frenar a las chinches, debemos aclarar que la mejor solución, y la más eficaz, siempre será acudir a profesionales. Hay plaguicidas especializados que pueden convertir, fácilmente, cualquier problema con estos insectos en un mero trámite pasajero. En realidad, las plagas de chinches suelen ser las más difíciles de erradicar, estos bichos son pequeños, escurridizos y se esconden muy bien.

Por eso, lo más fácil es contar con personal que tenga equipo especializado y experiencia para erradicar a estos insectos de la forma más breve y menos traumática posible. Puede que sus servicios supongan un coste mayor que cualquier remedio casero, pero la tranquilidad y las ventajas de lo que brindan es algo que vale cada céntimo que se paga por ello. Esta es la mejor forma de eliminar, pero también de evitar por completo los problemas de las chinches.

Las plagas en los hogares son algo mucho más habitual de lo que se suele pensar. Cualquier pequeño descuido puede provocar estas indeseadas visitas que, al final, se solucionan con facilidad si se acude a las manos adecuadas. A veces pueden remediarse por cuenta propia, pero otras muchas al final intentar métodos caseros solo consigue alargar una situación que se remedia directamente con expertos. Nunca está de más probar, pero se ahorra tiempo y se gana calidad de vida cuando se deja todo en manos de un equipo preparado.