En el universo del marketing digital, el uso del email es una de las herramientas que aplican los creativos para aumentar el tráfico de las visitas de las web y el posicionamiento, lo que se traduce en mayores ventas.
Sin embargo, en el momento de planificar la campaña, se deben estudiar varios aspectos para rentabilizar estos esfuerzos. A continuación, mostraremos las recomendaciones para enviar una newsletter efectiva. Recuerda que desde el blog oficial de Mail Relay se pueden encontrar todas las pautas para hacer una newsletter de éxito.
Lista de suscriptores
Es vital conocer a los suscriptores que han confiado en la empresa para saber cómo hacer una newsletter efectiva para ellos. Se deben analizar los perfiles, ya que no todos son usuarios habituales, y algunos no van a llegar a abrir el correo.
En el análisis se deben responder algunas preguntas, como: ¿Qué motiva a los suscriptores? ¿Cuál es el tono y el trato ideal para acercarse a ellos? ¿Cuál es la frecuencia y el horario del uso de su email? ¿De dónde son los usuarios que abren los correos?, y otras más específicas en relación con el tipo de mercado de la empresa.
Para completar los perfiles de los suscriptores, se precisa el tipo de lead: ¿realmente son compradores potenciales o solamente les interesa descargar el contenido del lead magnet? A la hora de rentabilizar el alcance del newsletter, se calcula la relación entre los suscriptores inscritos y los clientes potenciales.
Si están inscritos 25 usuarios, pero de ellos solamente son 2 los que realmente desean comprar, la campaña no es efectiva. En cambio, si son 6 inscritos y 6 quieren adquirir los productos, es posible aumentar el número de ventas concretadas y clientes fidelizados, de forma ascendente y sostenida.
Objetivos realistas y análisis de los KPI
Después de medir el número de suscriptores y estudiar sus perfiles, se establece el objetivo del número de leads que se desea atraer en un tiempo específico, por ejemplo en 3 meses. Esta meta debe ser realista, en marketing digital los resultados no se dan de forma espontánea.
A continuación se analizan los indicadores claves de rendimiento (KPI): porcentaje de clics por emails abiertos, tasas de conversión y de apertura de los correos.
De esta manera, al tener todos estos datos se diseña la campaña de marketing, para entregarle precisamente lo que busca el usuario al recibir en su buzón de entrada el email de venta:
- ¿Qué solución trae al usuario el producto en venta?
- ¿Cómo ayudan los servicios ofertados al cliente?
- ¿Por qué este producto y servicio es ideal para el usuario?
- ¿Por qué es una solución exitosa?
- ¿Cuál es su precio?
- ¿Qué beneficio extra le trae estos productos?
- ¿Qué hace especial y única esta marca?
- ¿Qué los diferencia de los competidores?
Inicio de la campaña
Se precisa cuál va a ser el ritmo y la frecuencia, así como el tono. Si va a ser un esfuerzo agresivo para captar nuevos clientes o una campaña más moderada para evitar saturar a los suscriptores. Vale destacar que el newsletter no es la única estrategia de marketing, por lo que ésta debe integrarse junto a las otras estrategias como envío de sms masivos, uso de las redes sociales y producción de contenidos en la página web.
El proceso debe orientarse a entrar en contacto con todos los suscriptores, cultivar la credibilidad y buena reputación de la marca, ser empático y revisar todo el tiempo opciones para corregir los errores y tener alternativas de mejora.
La voz del usuario
Una de las áreas que suelen descuidar las empresas son los canales que abren en sus buzones de sugerencias, comentarios en su página, en Facebook o en Instagram. Esto no puede ocurrir, recordar que el marketing digital afecta directamente la credibilidad del producto. La palabra del usuario debe ser atendida y escuchada oportunamente.
El equipo de creativos debe vigilar diariamente la comunidad de seguidores de la empresa en Internet. Un comentario negativo puede hacerse viral que en pocos minutos, y puede acabar con el buen nombre de una compañía.
La práctica del email marketing debe realizarse con una metodología rigurosa, igual que las demás estrategias de marketing. Millones de empresas aplican esta estrategia y el buzón de entrada de los usuarios se llena cada día más. Para destacar de ellos y evitar ir al spam, hay que conmover al cliente y darle exactamente lo que necesita.