¿Dónde están mis datos personales?

Editoriales

La fuga masiva de datos desde Facebook a Cambridge Analytica aumenta a 87 millones de usuarios, que se sepa hasta el momento. Un problema muy grave que afecta a los usuarios, pero también a la propia red social, que no sabe cómo ganarse de nuevo la confianza de los usuarios.

Vuelve a estar en tela de juicio la seguridad y la privacidad en las redes sociales. La cosa ha llegado a tal punto, que su consejero delegado, Mark Zuckerberg, comparecerá ante el Congreso de Estados Unidos.

La cuestión es que Facebook, la red social más grande del mundo, ha demostrado su incapacidad para proteger los datos personales de millones de personas. Además, estos datos se han utilizado de forma maliciosa, con el fin de interferir en campañas electorales, en especial la que enfrentó a Trump con Hillary Clinton. También se han utilizado con fines comerciales no autorizados.

La forma en que se recopilaron los datos por Cambridge Analytica fue muy trabajosa, ya que empezaron en 2014. Esta consultora pagó a cientos de miles de estadounidenses para que, a través de una aplicación (thisisyourdigitallife), se hiciesen unos test de personalidad creada por un profesor de la Universidad de Cambridge, y aceptaron que sus datos fuesen utilizados con fines académicos. Pero algo aparentemente banal, dejaba también al descubierto para dicha aplicación los datos de los amigos y perfiles añadidos que estas personas tenían en Facebook. Y también fueron recopilados… éstos sin consentimiento.

El resultado es lo que ahora ha salido a la luz… Hay que tener en cuenta que los datos que Facebook recopila son muchísimos. Desde nuestros gustos comerciales, hasta nuestras tendencias políticas, pasando por religión, hobbies, nivel económico, viajes que realizamos… Con todo ello, la consultora fue capaz de diseñar una campaña política perfectamente personalizada para cada usuario, mediante complejos algoritmos.

Aunque Facebook no diseñó el sistema, sí que permitió, mediante agujeros de seguridad, que los datos fuesen recopilados. Ahora, la compañía se enfrenta a multitud de problemas, y aunque trata de superarlo lo antes posible, lo cierto es que opino que esto no acabará tan rápido… Se están adoptando a marchas forzadas nuevas medidas de seguridad por parte de la red social, pero la repercusión, en esta ocasión, va a ser muy importante. Porque, aunque la mayoría de usuarios no termina de entender muy bien qué ha ocurrido, los grandes poderes políticos y económicos del mundo han plantado las orejas… y empiezan a sospechar que algo se les puede ir de las manos en cualquier momento.

La información es poder. Y en la actualidad, es el mayor de todos.

Redacción - Caudete Digital