Fuente: Ayuntamiento de Caudete /
El pasado viernes, la Junta de Gobierno Local dictaminó a favor de proceder con la contratación de un servicio de inspección que le preste al Ayuntamiento de Caudete la asistencia técnico-jurídica encaminada a la obtención de mayores ingresos respecto a la Ordenanza Fiscal nº 24, Reguladora de la tasa por tendidos, tuberías y galerías para las conducciones de energía eléctrica, agua, gas o cualquier otro fluido.
Cabe recordar que la Ordenanza, que data del año 2005, establece en su Artículo 6 que “…la cantidad a liquidar y exigir por esta tasas, consistirá en todo caso y sin excepción alguna en el 1,5 por ciento de los ingresos brutos procedentes de la facturación que obtengan anualmente en el término municipal las empresas explotadoras de servicios de suministros que resulten de interés general, o afecten a la generalidad o a una parte importante del vecindario”.
Por tanto, la liquidación de esta tasa la emite el Ayuntamiento en función del importe que las empresas suministradoras presentan como oficiales, cantidades que el Departamento de Recaudación y Tesorería considera que deben ser inspeccionadas, porque se sospecha de la existencia de variación en general, tanto por los importes brutos que exige la Ordenanza, como por posibles empresas suministradoras que no estén cumpliendo con su cometido fiscal.
De hecho, esta medida, a priori, permitirá al Ayuntamiento poder recaudar con carácter retroactivo cerca de 25.000 €, así como incrementar la recaudación por este concepto en torno a los 10.000 € anuales para los próximos ejercicios, lo que supone una importante mejora en la gestión económica de los recursos municipales para poder destinarlos a la mejora de servicios e infraestructuras públicas.
Presentadas dos ofertas al proceso de licitación, ha resultado adjudicataria la mercantil Enertecnia Servicios Técnicos S.L. al ofertar el menor porcentaje de comisión, del 12’5% + IVA calculado sobre el incremento de la recaudación producida por estas acciones en la Tesorería Municipal.
La propuesta, que parte del Departamento de Tesorería y Recaudación, basa su necesidad en que el Ayuntamiento no cuenta con el personal cualificado para llevar a cabo unas tareas específicas y técnicas, que no se consideran permanentes, sino excepcionales, y que llevan una importante carga de trabajo, además de ser un proceso de investigación minucioso.