En el Pleno Ordinario del pasado jueves, la Corporación dotó de un Reglamento al Ecoparque Municipal, propuesto por la Concejalía de Medio Ambiente, dirigida por Fran Castelló, de Vox.
Los concejales del Grupo Municipal Popular, que tiene la Alcaldía y la mayor representación en el gobierno de coalición, votó a favor de la norma, según expresan «por responsabilidad de Gobierno y por lealtad institucional», basándose en dos cuestiones muy concretas:
– La primera, «porque culmina el trabajo desarrollado en la anterior legislatura por el gobierno del PP, en la que el concejal delegado de Medio Ambiente y Servicios, Joaquín Pagán, estuvo trabajando en el desarrollo de la norma, para dar forma al uso de una instalación que desde su apertura en 2003 carecía de ella», subrayan los populares.
– En segundo lugar, «porque lo que hasta ahora era un proyecto, ahora es una necesidad legal a la que obliga la Consejería de Desarrollo Sostenible«.
No obstante, los populares dejaron claro en su intervención del Pleno que el texto aprobado inicialmente lo consideran incompleto, ya que no da respuesta a las demandas reales de los caudetanos ni da solución a la situación real del municipio. Este posicionamiento ha sido justificado en los siguientes hechos:
1. El horario precisa urgentemente ser adaptado para que los fines de semana esté abierto.
A día de hoy, permanece cerrado sábados tarde, domingos y lunes durante todo el día. Son las jornadas de mayor disponibilidad de tiempo de los caudetanos, cuando realizan con mayor intensidad las tareas domésticas y mayor uso de las segundas residencias y terrenos agrícolas.
El cierre en estas franjas horarias llena los puntos limpios ubicados en los diseminados, y sospechan los populares que origina un aumento de vertidos incontrolados.
Igualmente, remarcan que el ajuste en el horario de apertura es posible hacerlo ya, y no es necesario esperar a un nuevo pliego.
2. El artículo 13 del Reglamento impone unas cantidades máximas diarias de residuos que los caudetanos pueden llevar al Ecoparque. Consideran que no es una medida de impulso al cuidado del Medio Ambiente, la sostenibilidad y el fomento del reciclaje, y que el mal uso de algunos no puede ser la restricción para todos.
Por ejemplo, no más de 5 maderas, 5 enseres/muebles, 6 capazos de escombros o 1 saca de restos de poda (aprox. 1m3), son algunos ejemplos de lo que limita el texto. Entienden los populares que para empresas sería lógico estas cantidades, pero no para ciudadanos de a pie, para quienes realmente está pensado y diseñado el Ecoparque.
Matizan que quizás este tipo de medidas, en vez de impulsar el uso del Ecoparque, hace que se haga un uso incorrecto de contenedores y puntos limpios, y proliferen los vertidos incontrolados, tal y como lamentablemente se está viendo. Una acción «totalmente injustificada y que denunciamos», añaden.
3. El texto no refleja medidas que favorezcan la economía circular, ya que sigue sin posibilitar a los caudetanos a reutilizar, revalorizar y dar una segunda vida a residuos llevados al Ecoparque.
Un articulado preciso y adecuado consideran que daría respuesta a esta demanda de los caudetanos, reduciría los vertidos y, por lo tanto, los costes de gestión del Ecoparque, y permitiría la reutilización de los vertidos por parte de la ciudadanía.
Así las cosas, el Grupo Municipal Popular expresa que «una vez facilitada la aprobación del Reglamento y, por ende, del cumplimiento legal, consideramos que una modificación del texto en estos términos es urgente acometerla, con la participación de los caudetanos y el consenso de la Corporación, lo que esperamos se produzca prontamente».
