Fuente: Grupos Oposición Caudete /
«El alcalde demostró la pasada noche en el Pleno Ordinario su poco talante y su cobardía al no permitir que la oposición hiciera ruegos y preguntas, dando carpetazo y finalizando el Pleno a las 00:00
Moisés López decidió anoche dar un nuevo ejemplo de actitudes antidemocráticas y cobardes al dar por finalizado el Pleno sin que se hubiera llevado a cabo el turno de ruegos y preguntas. Es cierto que la ley le asiste, pero igual de cierto es que sobre esa posibilidad, lo normal es que los grupos políticos lleguen a un acuerdo sobre si utilizarlo o no. Sin embargo, este es el uso habitual que hace nuestro alcalde de una mayoría absoluta conseguida a través de los votos de un tránsfuga.
A Moisés le molesta la Oposición, que representa casi a la mitad de las caudetanas y caudetanos. Le molesta porque señala las carencias de su gobierno y lleva la voz de la ciudadanía al Salón de Plenos.
Quizá anoche ya no podía más. Los grupos de la oposición señalamos sus contradicciones al vender grandes números que no se reflejan en mejoras para Caudete, los salvamos del ridículo corrigiendo un reglamento de Protección Civil manifiestamente ilegal y los obligamos a salir de su silencio sobre una cuestión de actualidad en Caudete, ¿qué quieren hacer con el mercadillo?
Moisés López sabía que aún le quedaba un buen rato de examen: el hundimiento del Molino de San Antón, las innumerables roturas de agua, las subidas de impuestos, las diferentes plagas de insectos y roedores, desinfección de las calles, los problemas con el alumbrado encendido a medio día y a oscuras de noche, las calles llenas agujeros y baches, los caminos destrozados por las obras de la autovía, la falta de accesibilidad de las aceras, los parques pendientes de arreglar, las subvenciones, los problemas de carga y descarga en el paseo, denuncia de vecinos por los continuos cortes de agua de hasta tres días, turnos de policía sin cubrir, numerosas solicitudes denegadas de devolución de tasas de actividades municipales…
Pero, sobre todo, lo que no quiere escuchar este equipo de gobierno, es que le digamos que no puede seguir con los reparos que nos trae pleno tras pleno. Además, incluso el interventor ha avisado de que está situación puede acarrear problemas.
Muchas de estas cuestiones nos las trasladan los ciudadanos y cuando no se nos permite hacer ruegos y preguntas, lo que se está impidiendo es que los ciudadanos tengan voz, se les está negando información y soluciones de aquellos problemas que nos trasladan y que les preocupan, porque afectan a su día a día.
Moisés López sólo acepta palmaditas en la espalda y pretende ponerle una mordaza a la Oposición y a todo aquel que haga públicas sus quejas en temas municipales. Con las restricciones y precauciones que impone la situación sanitaria, Moisés López se ha visto privado de lo que le gusta de la alcaldía: las fotos en los actos, ponerse medallas del esfuerzo que hacen otros colectivos o asociaciones.
Con su agenda vacía y los problemas de Caudete acumulándose, quizá le pudo la presión de que quedara en evidencia la realidad de su gobierno: que es un gobierno de charanga y pandereta, eso sí, con los sueldos más caros de la historia.»