Los caudetanos Sergio Medina Solera y Daniel Díaz Requena han hecho cima en el Monte Cervino (4.478 m.) en las últimas horas. La expedición caudetana todavía está descendiendo, ahora mismo se encuentran en el refugió Solvay Hut, a 4.000 m. y mañana continuarán con el descenso.

El monte Cervino-Matterhorn es la montaña más famosa de los Alpes. Hace frontera entre Suiza e Italia y, con sus 4.478 metros, es la 5ª montaña más alta de los Alpes. Además, es una de las montañas más bellas y peculiares del mundo.

Sergio y Daniel nos comentan: «Nos ha resultado una cima muy difícil, ya que es muy técnica y expuesta. La más dura que hemos hecho hasta la fecha, puesto que a la dificultad de la escalada hay que añadir el pésimo estado físico en el cual nos encontramos los dos, recién salidos de unas lesiones y sin haber preparado nada este reto. Pero, en afán de superación y amor propio, la verdad es que vamos bastante bien, y es lo que nos ha llevado a poder hacer cima después de un duro viaje de 1.600 Kms. y subir sin aclimatar al refugio Honrli, ya que tuvimos que comenzar el ascenso desde otro punto, porque el telesilla que nos llevaba al mismo pie de inicio no estaba en servicio. Eso nos supuso una caminata extra, que junto a la voluminosidad de las mochilas, nos hizo llegar ya un poco fuera de juego. De ahí nuestra decisión de subir lo justo de avituallamiento, también creyendo que la ascensión iba a ser más llevadera.»

«Pero no fue así.», continúan. «Llevamos dos días dosificando el alimento. Ayer, comiendo dos tristes barritas, una lata de atún, un yogurt a compartir y el agua casi ni la probamos, ya que parte estaba congelada. Por motivos físicos, no pudimos continuar, nos dolía mucho la cabeza. En nosotros estaba reflejado el famoso mal de altura, así que a las 12 del medio día, y dando ya la cima por perdida, nos tocó meternos en nuestros sacos… Bueno, Daniel tuvo que ingeniárselas y hacerse un saco de imprevisto, ya que el suyo, al ser muy pesado, lo dejó en el albergue con otro material. No obstante, pudo pasar buena noche, gracias a las mantas y a un saco que había en el refugio de emergencia Solvay.»

«Hoy comenzamos a eso de las 6 horas, con un jugoso y helado pavo, acompañado de un pelín de aquarius que nos quedaba, guardando así unas jugosas chocolatinas que hemos podido saborear al concluir la jornada, y guardando otras dos, con lo que queda de almendras, para mañana darnos un suculento almuerzo. El día de escalada de hoy ha sido un tanto especial, puesto que Daniel no estaba por afrontar este tipo de paredes con escalada mixta con hielo y nieve… Por ello, el que iba abriendo las vías era Sergio, que, pese a los salientes de roca y una escalada mixta, nos ha sabido encauzar a lo más alto.»

Nos sentimos muy orgullosos y felices de nuestro reto, ya que es una cima muy marcada por las desgracias, así que, pasito a pasito, y tocando madera, esperamos ver pronto a toda aquella gente que nos ha apoyado en esta locura. Mil gracias de corazón, sin vosotros esto hubiera sido de otra manera.»

«¡Saludos desde los 4.000 m. de Sergio Medina Solera y Daniel Díaz Requena!»