Hoy ha continuado el juicio por la muerte de dos bebés en Caudete, con un año de diferencia, en la Audiencia Provincial de Albacete.

Entre otros testigos, han declarado las trabajadoras sociales de Caudete que trataron al segundo niño fallecido. Según han contado, realizaron un total de 21 visitas al domicilio, pero no detectaron «factores de riesgo», al igual que la trabajadora social del Hospital de Almansa, que ha declarado que tampoco advirtió «ningún indicador de riesgo».

También han indicado ambas trabajadoras que los progenitores les contaron que su primer niño había muerto «por una negligencia médica relacionada con una vacuna». Según han dicho, veían a la madre «sobreprotectora», algo que entendieron como normal,  tras la muerte del primer bebé.

«Alguna vez preguntamos a los vecinos si escuchaban llorar al bebé y nos dijeron que no», ha relatado la trabajadora social, quien ha añadido que «me dio la impresión de que ella -la madre- se manejaba adecuadamente con el niño».

La madre acudía a las visitas programadas con la pediatra

Durante la jornada también han declarado la pediatra y la enfermera de Caudete, que han señalado que el niño acudía a las visitas programadas y que nunca notaron signos de dolor en el niño, ni fracturas. Por otra parte, han manifestado que la madre no les refirió en ningún momento que el pequeño tuviera vómitos continuos, ni mucho llanto, ni problemas de respiración, como se pudo ver en los mensajes de Whatsapp de la madre.

Una vez que murió el segundo niño, los padres contaron a la familia que el médico de Urgencias les había dicho que había fallecido «por muerte súbita».

Foto: EFE/ Manu/POOL