Las situaciones extremas no son recomendables y, consecuentemente, tampoco son deseables. En el equilibrio está la virtud.
Hubo un tiempo, no hace tantos años, en que los conejos de monte escasearon hasta el extremo de que los cazadores estaban aburridos de darle vueltas al monte y no encontrarse con ninguno. Se “culpaba” a unos, a otros, a esto, a aquello,… La cuestión era que escaseaban, y mucho. Indudablemente, esta situación era un problema real, pues en la cadena alimentaria estos animales son el sustento de muchos otros a los que su escasez también estaba poniendo en serio peligro, pues como todos sabemos, si no hay comida, es difícil sobrevivir.
Esta situación, que parecía inevitable e irreversible, sin saber cómo ni por qué (por lo menos, eso nos dicen) ha cambiado, y lo ha hecho con tal eficacia, que ahora se está dando la paradoja de que todo el mundo está preocupado por la masiva proliferación de estos roedores, hasta el extremo de que los cazadores no dan a basto en capturarlos vivos para reubicarlos posteriormente por otras zonas donde causen menos daños. Los agricultores están asustados porque se comen las siembra, las viñas, los olivos, etc. y los responsables de infraestructuras también lo están, porque perforan los taludes que dan soporte a carreteras, ferrocarriles, embalses, etc., debilitándolos y poniendo en serio peligro la seguridad de las personas.
Es curioso ver cómo encontrarse con algún ejemplar de este simpático animal ha pasado de ser casi una noticia, a ser algo tan cotidiano, tan excesivamente frecuente, que está dando lugar a una cierta alarma social.
Según los datos que manejamos en el Ayuntamiento, y que forman parte de un dossier que se ha elaborado en este Consistorio para trasladar a los responsables de otras administraciones, el año 2015 la Sociedad de Cazadores de Caudete capturó con hurones más de 4.500 conejos vivos, que trasladó a zonas de monte para que se adapten en esas zonas y dejen de ser un azote para el resto de la sociedad. A pesar de esta cifra, ciertamente elevada y que demuestra que también ellos están preocupados por este problema, los agricultores calculan que los daños causados a siembras, viñas, olivos, etc, ascienden a mas de 500.000 €. Falta valorar los daños en taludes de todo tipo de infraestructuras, y eso sólo en nuestro término municipal, lo cual nos da idea de la magnitud del problema al que nos estamos enfrentando y que, por supuesto, desde el Ayuntamiento no tenemos medios materiales ni económicos para afrontar con eficacia.
Consciente de que sin ayuda no podremos resolver este grave problema, y que dada la capacidad de reproducción de estos roedores va a ir a más, el pasado jueves 19 de mayo el Alcalde de Caudete, José Miguel Mollá mantuvo una reunión de trabajo con el Delegado de la JCM, D. Pedro Aº Ruiz Santos, a quien mostró el dossier antes citado, quedando muy impresionado del daño causado por estos animales en nuestros campos. El Delegado se comprometió a buscar alguna solución a esto, que él mismo calificó como de auténtica plaga.
Desde el Ayuntamiento queremos agradecer esta buena disposición, y esperamos que cuanto antes se nos notifiquen las medidas a adoptar.
Fuente: Ayuntamiento de Caudete
