Comunicado de Moisés López, alcalde de Caudete /

Lo de Explotación de Canteras Tanit es de libro. Como el pataleo de un niño pequeño cuando no consigue lo que quiere, igual se comportan. Sin escrúpulos, engañando a quien se cruzan y acusando a quien sea necesario de lo primero que les venga por la cabeza. Evidentemente, todo ello fruto de la desesperación, de la avaricia, y algún día sabremos de qué más.

Saben que Caudete no les quiere aquí con su actividad. Que los caudetanos no queremos su cantera en nuestra Sierra. Que nuestra Sierra, además de tener un gran valor que la protege, no tiene el mínimo de calidad que la roca ornamental requiere para su comercialización. Pero ellos r que r. Y todo esto lo saben de sobra.

Llevan años con este proyecto, que nos consta les ha costado mucho dinero en ingenieros con proyectos, y en abogados ante los tribunales. Tanto, que incluso dudo de que lo estén asumiendo ellos. Tanto, que dudo de si hay alguien detrás de todo este berenjenal, y que los pobres representantes de Tanit, Mónica y José Luis, son dos víctimas del engaño de un tercero, a cambio de un puñado de euros.

Fíjense. Toda la vida comercializando en Aspe, y bajo la firma Tanit ni una cantera en funcionamiento, pues crearon la empresa en abril de 2016, justo para la que pretendían hacer en nuestro término. Pregunten en su comarca por ellos, a título personal, o a título profesional. Yo lo he hecho.

Y sí: además de comportamiento infantil, argumentos de patio de colegio. Un día te acusan de machista por no dar una licencia de obras por ser una mujer la que lo solicita, y al día siguiente confunden licencia de obras con la de actividad. Se atreven a acusar de algo muy serio a un Delegado Provincial, como Nicolás, y luego omiten el documento que les otorga el acta de defunción al proyecto de cantera.

Una cuestión personal

¿Saben por qué no quise en su día actuar contra Mónica por tan graves acusaciones? Por pena. Porque con la enfermedad que sufría, ya tenía bastante la pobre.

De juzgado de guardia lo de este matrimonio, que juega a ser explotador de sierras, donde se están dejado sus ahorros, y ahora ven que no llega a buen puerto. Y eso que estaban avisados.

Fíjense que quien tiene la potestad de otorgar las autorizaciones, es la JCCM. Sin embargo, soy su principal objetivo. ¡Como si yo fuese el Juez que dicta Sentencia, o el Delegado que concede o deniega autorizaciones!

Claro que se han encontrado con un hueso duro de roer, y no esperaban que «este Alcalde» les pusiese freno a todos sus movimientos, y defendiera los intereses del municipio como es debido. Claro que esperaban alfombra roja, y han encontrado lo contrario. Tanto azote, que se han propuesto aprovechar los tiempos y sumarse a la precampaña electoral, que no te extrañe que azuzado por algún partido, para hacerles la cama, y jugar al desgaste. Han pasado de gustarles la piedra ornamental a la piedra pómez.

Y ahora, hasta parece que les importa mi vida personal, y dónde he trabajado o dejado de trabajar. Y eso que en los pueblos todos nos conocemos.

A mucha honra, le diré a Mónica, José Luis y a quien no lo sepa, que con mucho esfuerzo, tengo mi titulación universitaria, como tantos jóvenes de mi generación, de anteriores y posteriores. Grado en Arquitectura Técnica, que nadie me la regaló. Que me la curré, y que me tuve que costear trabajando lo que la economía familiar no podía. Que he trabajado en el régimen agrario, como pintor y en una industria de corte de mármol, que no una cantera. Que tuve el honor de ser concejal electo en 2015 y en 2019, que por circunstancias tuve el encargo de asumir la Alcaldía, y dos años más tarde el privilegio de recibir el encargo de continuar siendo Alcalde de mi pueblo. Que quien me conoce, sabe que me dejo las horas, la piel, el corazón y todo cuanto puedo aportar, por mi pueblo. Y que por él, hago lo necesario y más.

Mónica, desesperada, no asume que la Delegación de Desarrollo Sostenible haya caducado su expediente. Que la lucha de estos años no haya servido para nada. Que el tiempo y el dinero invertido, sean sólo un triste recuerdo.

Posible infracción urbanística

José Luis, Administrador Único de la empresa, valiente él como ninguno, decidió colocar unas estacas en una parcela que no es suya, y sin tener el permiso para ello, la Licencia de Obras. Y tan airoso lo reconoció delante de la Técnico de Minas, en el despacho de Alcaldía, que ésta quedó estupefacta. Sorprendida por tal bravuconería chulesca e ilegal. Tanto, que le dejé claro que desde el Ayuntamiento no íbamos a dejar nuestro empeño en hacer caer la ley contra TANIT y en defender los intereses del municipio con uñas y dientes. Le avisé de lo que iba a suceder. Y lo cumplí.

Cabreado, ese señor, por llamarle de alguna forma, quiso enmascarar mi imagen ante los caudetanos, anunciando que en 9 días se iniciaría la actividad y anunciando una bolsa de trabajo. Quiso agitar a la población en contra del alcalde. José Luis, una persona manipuladora y mentirosa. Mentirosa, porque en 9 días no comenzaron los trabajos. Manipuladora, porque jugó con el sentimiento de los caudetanos: de los que queremos defender la Sierra del Cuchillo, y de los que veían en el horizonte un posible trabajo. En mi pueblo, a eso se le llama ser mala persona. La RAE lo definiría como «non grata».

El Ayuntamiento, en defensa de los intereses del municipio, levantó acta de lo acaecido en la parcela respecto a las estacas, y ha incoado expediente, y ha solicitado a la Diputación el nombramiento de Instructor para dirimir si existe infracción urbanística de algún tipo, ya que se dan indicios de ello.

Caducidad del expediente

Al margen de esto, en Caudete celebramos la comunicación de la Delegación de Desarrollo Sostenible por la que expresa la caducidad del expediente y, por tanto, la imposibilidad de desarrollar la actividad de Tanit Tres en la Sierra del Cuchillo.

Por tanto, pido a Mónica y a José Luis, representantes de Tanit, que se olviden de Caudete, y reorienten sus proyectos en otro lugar donde sean bien recibidos, donde no se rían de los vecinos del municipio ni de sus dirigentes, y donde la legislación les permita llevar a cabo con total transparencia, legalidad y tranquilidad su actividad.