Con la entrada en vigor ayer de las medidas especiales de la Fase III por la situación sanitaria del Covid-19, el Mercadillo de los viernes sufre un reajuste importante.
Ante ello, la Concejalía de Comercio ha procedido al cumplimiento de la normativa dictada, por el cual se reduce a 1/3 el número de puestos, con una distancia entre ellos de, al menos, 4 metros.
Además, sólo se venderán productos de alimentación.