Mejores futbolistas de Albacete provincia
La provincia de Albacete no es la más poblada de España, pero sin embargo ha dado algunos talentos futbolísticos serios, incluidos jugadores populares cuyos días de gloria contamos a continuación.
Andrés Iniesta
A la cabeza, con bastante distancia en lo que respecta a los futbolistas más populares que jugaron para España y vinieron de Albacete, está Andrés Iniesta. Grande no sólo en los escenarios provinciales sino nacionales e incluso internacionales, Iniesta tuvo una larga y exitosa carrera futbolística, durante la cual jugó para uno de los clubes más grandes del mundo y ganó una gran cantidad de medallas de plata. Incluso le dio su nombre a Sports City.
Irónicamente, los primeros días de Iniesta en Fuentealbilla lo vieron jugando no al fútbol sino al fútbol sala porque su pueblo no estaba desbordado de campos de fútbol. Por suerte para él, una conexión entre sus padres y Enrique Orizaola, entrenador del equipo juvenil del Barcelona, terminó con un joven Iniesta dirigiéndose a la cantera del club. Las cosas salieron bien y, llegado el 2004, su estado de forma fue lo suficientemente bueno como para meterlo en el primer equipo. En 2004-5 se perdió solo un partido de liga e hizo más apariciones que nadie. La temporada siguiente, Iniesta salió a la cancha para la final de la Champions League y ayudó al Barcelona a coronar el año con un doblete (también ganó el título de liga esa temporada).
La versatilidad de Iniesta, aparentemente capaz de jugar desde casi cualquier posición, le valió elogios de espectadores y expertos. En 2008-9, se puso el brazalete de capitán por primera vez. Su gol de la victoria contra el Chelsea llevó al Barcelona a la final de la Champions League contra el actual campeón Manchester United. Una lesión no pudo impedir que Iniesta jugara, y él jugó su papel para conseguir otro título europeo para el club.
Si bien el Barcelona siguió gozando de éxitos, las apariciones de Iniesta se volvieron más irregulares debido a temporadas arruinadas por las lesiones. Y cuando apareció fue más a menudo en un período temporal como suplente que como el núcleo del equipo. La muerte de su amigo Daniel Jarque también supuso una carga psicológica para Iniesta, que finalmente se alivió cuando el jugador marcó el gol de la victoria de España en la final de la Copa del Mundo (2010) y se lo dedicó a su amigo perdido. La popularidad de Iniesta estaba fuera de toda duda, ya que incluso los equipos rivales lo ovacionaron de pie (incluido el Espanyol, del que Jarque había sido capitán). Como vice y luego capitán titular del Barcelona ayudó al club a conseguir más victorias y conseguir el triplete 2014-15 (convirtiéndose en el primer club europeo en conseguir esta hazaña en más de una ocasión).
En 2018, Iniesta dejó el club por el Vissel Kobe japonés y ayudó al equipo a ganar la Copa del Emperador de 2019. En el escenario internacional, jugó para equipos juveniles antes de unirse a la selección absoluta española en 2006 y jugó en la final de la Eurocopa 2008 que vio a España ganar el torneo. Como ya se mencionó, un punto culminante personal y de carrera para Iniesta fue marcar el gol de la victoria en la final de la Copa del Mundo de 2010 (aunque recibió una tarjeta amarilla por quitarse la camiseta para revelar un mensaje dedicado a su amigo). En 2012 jugó para el equipo español que retuvo el título europeo y se convirtió en el único jugador español en ser nombrado Hombre del Partido en tres torneos consecutivos ganados por el equipo. Como mediocampista defensivo, mediocampista ofensivo, extremo, mediocampista profundo y jugando justo detrás del delantero, Iniesta fue increíblemente flexible, siempre exitoso y fundamental para uno de los mejores períodos de Barcelona y España.
Apostando por el éxito futuro
Los padres y entrenadores que ven a jóvenes talentosos, tal vez un nuevo Iniesta, a veces hacen apuestas altas, apuestan durante una década para que jueguen en la selección nacional o se unan a un equipo superior como el Barcelona.
A corto plazo, muchos espectadores disfrutan de mezclar la pasión por el fútbol con la diversión de las apuestas, y muchos sitios de apuestas combinan las casas de apuestas con los casinos en línea. Esto último se puede aprovechar de forma segura mediante el uso de varios tipos de promociones, como los bonos españoles sin depósito que permiten a los jugadores intentar ganar dinero real sin depositar o arriesgar un solo euro. Es la forma ideal de jugar, y las apuestas gratuitas en las casas de apuestas ofrecen una oportunidad similar para intentar convertir el pronóstico del partido en ganancias.
Pablo Ibáñez
La historia de Pablo Ibáñez comienza en el pequeño municipio de Madrigueras allá por 1981, antes de mudarse al Gran Madrid. Su carrera futbolística comenzó jugando para un equipo local en El Carrascal, principalmente como centrocampista pero ocasionalmente como delantero. Debido a las conexiones de los padres con el club Albacete Balompié, Ibáñez se unió al equipo juvenil y pasó a una posición defensiva central.
En 2002, el buen hacer en los equipos junior y B vio recompensado a Ibáñez con un lugar en el primer equipo. Su primera temporada con el club fue en Segunda División, pero terminaron terceros y ascendieron a La Liga. A estas alturas, Ibáñez no había tenido muchas posibilidades de impactar, pero sus apariciones fueron suficientes para que la selección nacional sub-21 lo convocara. Asimismo, a nivel de clubes, numerosos equipos de renombre (sobre todo de Inglaterra e Italia) estaban interesados en ficharle, pero fue al Atlético de Madrid al que acabó acudiendo Ibáñez.
Gracias en gran parte a su presencia en la asociación defensiva central (junto a Luis Amaranto Perea), el Atlético registró el tercer mejor récord defensivo en La Liga en su primera temporada allí, solo detrás de Barcelona y Real Madrid. Ambos defensores fueron debidamente recompensados con aumentos salariales y extensiones de contrato para tratar de mantener el éxito. Ibáñez también llamó la atención de la selección española con la que debutó en la categoría absoluta ante Inglaterra, y se convirtió en un habitual de ambas selecciones. A pesar de la controversia sobre un traslado casi, pero no del todo, al Real Madrid (un rival de larga data del Atlético), Ibáñez permaneció en el equipo hasta 2010 cuando se unió al club inglés West Bromwich Albion. Aquí jugó durante unos años, antes de unirse al Birmingham City del campeonato. Desafortunadamente, las lesiones hicieron que su carrera en el club llegara a un final algo prematuro en 2013.
En el escenario internacional, Ibáñez jugó con la selección sub-21 en 2002 y 2003, y al año siguiente hizo su primera aparición con la selección absoluta. Acumuló 23 partidos internacionales desde entonces hasta 2008.
José Antonio Camacho
El último de nuestra pequeña lista es José Antonio Camacho, que no nació en Albacete pero cuyo primer equipo (en 1972) fue el Albacete Balompié, por lo que la provincia sí jugó un papel crucial en la base de su carrera. Poco después de graduarse de la categoría juvenil a la selección absoluta, Camacho se mudó del Albacete Balompié y se unió a uno de los gigantes del fútbol español: el Real Madrid. Aquí se convirtió en un pilar, con más de 400 partidos de liga y cerca de 600 apariciones en total para el equipo, para el que jugó desde 1974 hasta 1989, el final de su carrera en el club.
Camacho fue la mitad de una gran asociación de izquierda (junto a Rafael Gordillo) en el Real Madrid, y ayudó a su club a ganar Copas de la UEFA consecutivas (particularmente impresionante ya que esto siguió a dos años de baja debido a una lesión). En el escenario internacional, Camacho jugó por primera vez para España en 1975 y pasó 13 años como eje de la formación defensiva. Durante este tiempo participó en cuatro grandes torneos internacionales, el punto culminante fue cuando España terminó subcampeón de Francia en la Eurocopa de 1984. Pasó a dirigir varios equipos, aunque su permanencia en el Real Madrid como técnico no fue muy larga.
Y eso nos lleva al final de los jugadores populares que son (ya sea por nacimiento o por carrera) de la provincia de Albacete.
