El ciclista profesional Héctor Sáez ha comparecido ante los medios para denunciar lo que, a su juicio, es la peligrosa situación en la que ha quedado la carretera de Montealegre (AB-3004) tras las obras llevadas a cabo por la Diputación de Albacete.
«Estoy en el grupo de trabajo de Vox Caudete y hoy quiero denunciar las obras, malas obras más bien, que se han llevado a cabo en la carretera de Montealegre, ya que suponen un gran peligro para el colectivo ciclista que transita frecuentemente por la misma. No hay arcén para garantizar su seguridad frente a un coche o un tractor agrícola», explica Sáez.
«También hay que destacar que hay un gran peligro cuando se cruza un coche y un tractor agrícola, o un camión, en sentido contrario, ya que no hay el suficiente espacio y puede precipitarse por el talud al final de la cuneta, con el riesgo de volcar su vehículo», subraya el ciclista. Y añade que «una cosa es desbrozar las cunetas, como se ha hecho en otras ocasiones, y otra son las disparatadas e innecesarias zanjas que han abierto a ambos lados de la carretera. Zanjas que, como he dicho, la hacen peligrosísima para peatones, ciclistas y conductores de todo tipo de vehículos».
Héctor Sáez señala otro problema: las arquetas que se han construido cada ciertos metros, a pesar de estar señalizadas.
«Sinceramente, creemos que los responsables de la Diputación de Albacete deberían plantearse rellenar dichas zanjas y dejarlas a una altura en la que se reduzca el peligro al máximo, antes de que tengamos que lamentar alguna desgracia», ha finalizado Sáez.
Ciertamente, para hacer un arreglo en una pequeña carretera local el resultado ha sido un peligroso desarreglo con ese talud-disparate. Para eso que no se haga ná, sino que dejen las cosas como estaban. Una enésima chapuza local, esta vez con el patrocinio de la Excelentísima Diputación de Albacete. ¡Qué manera de odiar a Caudete! ¡Es algo inaceptable!
Es el resultado de hallarse en Tierra de Nadie, no hay beneficios ni de Valencia, ni de Alicante, ni de Murcia, y menos de Albacete, engullida en esa región-puzzle de cuyo nombre no me acuerdo. Bueno, porque no quiero.