La portada de "Charlie Hebdo" tras los asesinatos de buena parte de sus colaboradores la entendimos en Occidente como una muestra de respeto hacia Mahoma y hacia el Islam, pero es evidente que no lo entendieron así los musulmanes. Para ellos, es una blasfemia representar a su profeta no sólo a través de caricaturas, sino a través de cualquier otro tipo de representación gráfica.
Tras los asesinatos, muchos tuvimos un pensamiento primario de venganza: ¡ojalá todos los periódicos del mundo representasen esas caricaturas a diario y "que vean" que no podrán con nuestra libertad de expresión! Sin embargo, una vez pasada la primera reacción, creo que no es lo justo. Todas las religiones, y especialmente sus fieles, merecen respeto, y así lo recogen las leyes y constituciones de la mayor parte de los paises occidentales. Es cierto que esto no ocurre en otros muchos paises donde no existe esa libertad religiosa, pero se supone que nuestros valores democráticos y de libertad exigen respetar a todas las personas, sin hacer discriminaciones por la religión que profese cada cual.
Los musulmanes están sufriendo en sus propias carnes el terror de los radicales, de los extremistas que siguen el Islam sunní y que no aceptan ningún otro tipo de versión del Islam, en especial el chií. Pero todos ellos comparten, entre otras cosas, el sentimiento de que es una herejía la representación gráfica de Mahoma. Por tanto, hacerlo premeditadamente supone un agravio y una ofensa para los musulmanes, y en su inmensa mayoría son personas que merecen respeto.
Algunos líderes musulmanes que viven en España decían hace unos días que ellos se sentían muy ofendidos por las caricaturas, pero que callar y no mostrar su malestar públicamente era la postura que todos los musulmanes en nuestro país tomaban en pro de la convivencia. Sin embargo, no creo que sea lo ideal. Estoy en contra de que la inmigración suponga imposición en los paises donde se instala, pero también estoy en contra de molestar o atacar sus dogmas de fe de una forma gratuita.
La libertad de expresión es básica para todas las personas, pero lo sabio es hacerla compatible con la educación más elemental. Hacer burla de las creencias de cualquier ciudadano del mundo no parece ético, y aunque "Charlie Hebdo" puede seguir haciéndolo, porque para eso existe y disfrutamos de esa libertad de expresión, también es legítimo no estar de acuerdo con su línea editorial, y decirlo.
En definitiva, yo quiero que "Charlie Hebdo" pueda publicar lo que considere oportuno, pero no subamos a los altares su contenido por el mero hecho de haber sido atacado. Lo importante en este caso es la defensa de la libertad de expresión, no criminalizar y burlarse del Islam.